Hay dos tipos de pensamiento principales cuando se trata del cuidado del cuero: uno intenta mantener el cuero como nuevo y el otro se preocupa más por cuidar el cuero de una manera que permita que la historia de la vida del cuero, y su portador, emerja con el tiempo. Entonces, aquí hay 4 pasos simples para cuidar su cuero, ya sea maletín o bolso, de una manera que honre su historia y la suya:
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Maneras de Cuidar el Cuero
- Si su Cuero se Moja, Séquelo: Seque suavemente (¡no frote!) el exceso tan pronto como sea posible y deje que el resto se seque al aire. No utilice una fuente de calor para acelerar el secado. Al secar un bolso, rellene el interior con papel de periódico para ayudar a que la bolsa mantenga su forma y para ayudar a absorber la humedad del interior.
- Si su Cuero se Seca Demasiado, Acondicione: Masajee un acondicionador de cuero de alta calidad en el cuero y use un paño limpio para limpiar suavemente el exceso.
- Si su Cuero se Ensucia, Límpielo: Empiece por manipular siempre el cuero con las manos limpias; el aceite y los residuos se transferirán fácilmente al cuero. Cada dos días, barra enérgicamente su bolso de cuero con un paño suave, seco o ligeramente húmedo. Una o dos veces al año, elimine la suciedad acumulada limpiando su bolso de cuero con un limpiador hecho específicamente para cuero. Aplicar con movimientos circulares y limpiar con un paño ligeramente húmedo para no tapar los poros del cuero.
- Si no Está Utilizando su Cuero, Guárdelo: El almacenamiento adecuado es importante al cuidar el cuero. Guarde el cuero en un espacio alejado del calor, la humedad, la luz solar y el polvo, preferiblemente en un bolso o caja de tela (¡no de plástico!). Debe sacarlos a tomar aire una vez cada pocas semanas para evitar el crecimiento de moho.
Cuando cuidas adecuadamente el cuero, se volverá más hermoso, resistente e interesante con el tiempo, haciéndose eco de sus aventuras y de las tuyas.