El Dogo de Burdeos es un guardián de tipo mastín inmensamente poderoso. Los machos pueden medir 27 pulgadas de alto y 110 libras. El pelaje corto y llamativo es un leonado de colores intensos. La enorme cabeza presenta una mandíbula inferior parecida a un Bulldog, ojos expresivos y una ceja profundamente fruncida. Es, proporcionalmente, la cabeza más grande del reino canino. El cuerpo es robusto y está cerca del suelo, pero los dogos pueden moverse como leones cuando el deber lo llama.
Los Dogos de Burdeos de temperamento adecuado son almas dulces y sensibles. Los propietarios aprecian la lealtad de su raza hacia sus seres queridos de todas las edades, pero también dicen que los DDB pueden ser tercos y dominarán a aquellos que no apliquen un entrenamiento firme en la etapa de cachorro. Al adquirir un superperro tan robusto, encontrar un criador responsable es clave.
Apariencia General
El Dogo de Burdeos es una de las razas francesas más antiguas. Es un tipo molosoide braquicefálico típico. Es un perro muy poderoso, con un cuerpo muy musculoso pero que conserva un contorno general armonioso. Construido bastante cerca del suelo, la distancia desde el punto más profundo del cofre hasta el suelo es ligeramente menor que la profundidad del cofre.
Una cabeza masiva con proporciones y características adecuadas es una característica importante de la raza. Su expresión seria, complexión robusta y atlética y seguridad en sí mismo lo hacen muy imponente. Las hembras tienen características idénticas, pero menos prominentes.
Nutrición
El Dogo de Burdeos debe ser alimentado con un alimento para perros de alta calidad adecuado a la edad del perro (cachorro, adulto o mayor). Algunos perros son propensos a tener sobrepeso, así que observe el consumo de calorías y el nivel de peso de su perro.
Dé las sobras de la mesa con moderación, en todo caso, evitando especialmente los huesos cocidos y los alimentos con alto contenido de grasa. Aprenda qué alimentos para humanos son seguros para los perros y cuáles no. Consulte con su veterinario si tiene alguna inquietud sobre el peso o la dieta de su perro.
Aseo
La raza es bien conocida por la cantidad que babean y las arrugas en su área facial necesitan atención especial al menos una vez por semana, a veces a diario, para asegurarse de que se mantengan limpias y secas. Al menos una vez a la semana, también es importante limpiar los oídos y comprobar si hay restos o signos de infección.
Las uñas deben cortarse mensualmente. El Dogo de Burdeos debe recibir un baño completo cada cuatro semanas aproximadamente. Entre baños, limpiarlo con una toalla húmeda puede mantenerlo luciendo y oliendo bien. El pelaje corto de la raza se mudará durante todo el año; usar un curry de goma o una cuchilla para mudar puede mantener al mínimo el cabello suelto que cae al piso.
Ejercicio
Para evitar tensiones en los huesos y las articulaciones en desarrollo, el joven Burdeos debe limitarse a hacer ejercicio de bajo impacto hasta al menos los 18 meses de edad. No deben esforzarse demasiado y no se les debe permitir subir y bajar escaleras o saltar de superficies más altas que su espalda. La natación es un ejercicio excelente para los burdeos de cualquier edad. Un Burdeos más viejo puede trabajar más enérgicamente, incluso haciendo trabajos como tirar de carros.
Capacitación
La socialización y el entrenamiento de obediencia temprana son una necesidad absoluta. El Dogo de Burdeos es una raza sensible que requiere confianza, y se debe evitar un entrenador rudo o un enfoque de mano dura. La disciplina debe ser firme y constante sin ser dura. La propiedad de la raza no es para personas tímidas o muy ocupadas.
Salud
La hinchazón, o dilatación y vólvulo gástrico (GDV), es una preocupación seria en el Dogo de Burdeos. Los propietarios deben educarse a sí mismos para reconocer las señales de que la hinchazón podría estar sucediendo y saber qué acciones tomar si es así. Las enfermedades cardíacas, el cáncer, los problemas ortopédicos (como las caderas y los codos) y la epilepsia también son problemas de preocupación en la raza.
Los criadores responsables examinarán su ganado para detectar las condiciones a las que la raza puede ser propensa. Al igual que con todas las razas, las orejas de un Dogo de Burdeos deben revisarse regularmente para detectar signos de infección y los dientes deben cepillarse con frecuencia.