FOMO es el acrónimo de «Fear Of Missing Out». El concepto fue descrito por primera vez en 2000 por el Dr. Dan Herman en un artículo académico titulado «The Journal of Brand Management». Sin embargo, el acrónimo FOMO fue acuñado un par de años después por Patrick McGinnis en un artículo de opinión publicado en 2004 en la revista estadounidense «The Harbus».
¿Qué es el Miedo a Perderse o FOMO?
El concepto se refiere al sentimiento de ansiedad o la idea de que otras personas están compartiendo una experiencia positiva o única mientras tú te estás perdiendo. Es un fenómeno que prevalece bastante en las redes sociales; donde los feeds de otros a menudo destacan y enfatizan las partes positivas y gratificantes de sus vidas; lo que lleva al lector a sentirse triste o inadecuado con sus propias experiencias.
En el contexto de los mercados financieros y el comercio; FOMO se refiere al miedo que siente un comerciante o inversionista al perderse una inversión o una oportunidad comercial potencialmente lucrativa. El sentimiento FOMO es particularmente frecuente cuando un activo aumenta de valor significativamente en un período de tiempo relativamente corto.
Esto tiene el potencial de que un individuo (y la comunidad de mercado en su conjunto) tome decisiones de mercado basadas en la emoción (el miedo a perderse algo) en lugar de la lógica y el razonamiento. Es especialmente peligroso para el inversor minorista indisciplinado; ya que a menudo puede conducir a una situación en la que se realicen transacciones por un activo que está sobrevalorado; incurriendo en riesgos mucho mayores de pérdidas financieras.